• Dorados en el Dulce
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El jueves 30 de Septiembre partimos hacia Santiago del Estero siendo esta nuestra primera salida en la temporada buscando los preciados amarillos. Después de 7 horas de viaje llegamos a Loreto donde nos alojaríamos en el hotel, para salir el viernes a primera hora del día.

Nos levantamos muy temprano el viernes, habiendo dormido poco por la ansiedad, desayunamos y a las 6.20hs, el experimentado guía santiagueño, Cesar Neme, paso a buscarnos para llevarnos al río y flotar. Esta jornada, mi compañero de pesca seria el flaco Enrico Baistrocchi, al otro día sería el turno de Guillermo Arena, y Patricio Meglioli.

El clima no era el mejor, estaba frío y empezaba a soplar el viento, condiciones muy desfavorables para tentar a un amarillo, aunque el agua se mantenía un poco cálida por los días anteriores, a pesar de todo, los piques vinieron rápidos, comencé pescando con un equipo Nº8, línea Sinking Tip de 300 Grains, buscando que la línea baje rápido teniendo en cuenta que no se veía mucha actividad en superficie. Usando moscas modelos némesis como la publicada en una nota anterior, en color negro y con ojos de plomo, en un leader de 8 pies, y tippet de acero de 20 libras.

A los diez minutos de estar navegando el río en una empalizada pinche mi primer dorado, estaba muy ansioso por saber como sería el pique, teniendo en cuenta que era mi primer salida en busqueda de dorados, ya que mi experiencia siempre estuvo ligada a la pesca de salmónidos. La tomada fue violenta, era un dorado de casi 2 kilos, de los nervios no podía sacarlo, hasta que césar me ayudo a calmarme y dominarlo con el boga grip.

Primer dorado del día.

Los piques fueron sucediendo con el transcurso del día, alternando combinaciones de colores en el mismo modelo de mosca, en varios sectores que prometían buenos pescados, César paró la balsa para poder vadear y pescar los palos con más tiempo buscando un trofeo.

Antes de llegar a la zona donde pararíamos a almorzar, Enrico tuvo un pique muy bueno, era una vaca de las que buscábamos, pero lamentablemente después de un cabezazo afuera del agua logró escupir la mosca, y dejarnos a los tres en un momento de silencio…

El flaco Enrico bien abrigado por el frío.

La tarde continuo de la misma forma, completando la flotada con una captura de unos 20 dorados, entre los que destaco uno muy bueno que logre clavar a mitad de tarde, y la particularidad de haber tentado con mi mosca un sábalo, con lo que el día estaba cerrado para mí, la alegría era enorme y no veía la hora de volver al río nuevamente.

Un sábalo que tomó la mosca.

Al día siguiente nuestros compañeros Guille y Pato tendrían la oportunidad de flotar la misma zona, aunque la actividad no fue la misma, el día era cálido y soleado, pero el agua se mantenía templada, la mayor actividad comenzó a las 15hs. moviendo un par de dorados medianos. Evidentemente este río tiene muchos secretos, ya que el día anterior con condiciones peores los amarillos tenían más actividad, lo que nos deja abierto a seguir investigando y aprendiendo de este ambiente tan particular.

El pato con un dorado de vadeo.

Esa tarde con Enrico vadeamos, yo particularmente no pude mover ningún pescado, pero mi compañero saco cuatro, algo parecido a la jornada de vadeo del día anterior de quienes flotaban hoy.

El día domingo antes de emprender el regreso, y ya con la pesca hecha, fuimos al río a la zona de Sumamao a mojar las moscas un par de horas, fue ahí donde tuve la mayor emoción del viaje. Volví al mismo lugar de vadeo del día anterior donde no tuve ningún pique en todo el día, acomodé un buen tiro en unos palos con los que no dejé de pensar la noche anterior, y al caer la mosca, inmediatamente un dorado espectacular la tomo corrió debajo de los palos, dándome una buena lucha tratando de que no se enrede en la empalizada hundida. Finalmente conseguí sacarlo con la ayuda de mi compañero Enrico, concluyendo así el viaje más que conforme y ya planeando la vuelta.

Marcelo con un muy buen ejemplar vadeando el domingo.

TIPS PARA TENER EN CUENTA
No esta de más cargar unas municiones de plomo para lastrar el leader de acero en caso de necesitarlo de forma urgente.

Usar anzuelos 3/0 teniendo en cuenta que los dorados del dulce están creciendo.
Llevar espirales para el Hotel.

No confiarnos del clima cálido, ya que vadeamos con wader, polar y campera de vadeo.

Llevar el 70% de las mosca en color oscuro, alternando cabezas negras con cuerpo verde, amarillo y negro.

Nota: Marcelo «Tusca» Martín | Fotos: Enrico «Flaco» Baistrocchi.

 

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