• Dorados más activos en nuestra segunda visita a Santiago del Estero.
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Una semana después del la visita que realizaron nuestros amigos posteada en la noticia anterior, tuvimos la posibilidad de volver al Dulce después de un año, llegamos para comenzar a pescar el viernes 8 de Octubre a Loreto con muchas espectativas.

Me acompañaron Juan Cruz Ramirez, Juan Manuel Salvalaggio, Juan Carlos Rivero, Alejandro y Sebastián Pérez, más un séptimo integrante y futuro mosquero, Ezequiel Peña, quien estaría a cargo de la fotografía, y también de gran aporte en la logística. Ni bien llegamos al río ya empezamos a maravillarnos con el paisaje, y la vida del monte santiagueño en cuanto a flora y fauna se refiere, pudiendo ver cantidad de aves, muchos lagartos, incluso una curiosa corzuela, ni hablar de la vida que tiene bajo la superficie del agua…

La fauna del Lugar

Nos dividimos de a dos para flotar los tramos con el guía Cesar Neme, desde ¨La Pirucha¨ hasta la salida de¨Plato¨, un tramo con muy buenos palos. Mientras un día una pareja flotaba los demás podían vadear, y en este caso elegimos la zona de ¨La Pirucha¨, donde también estaba muy concurrido de pescadores por el fácil acceso al río, antes de hablar propiamente de los amarillos voladores, quisiera hacer hincapié en lo siguiente respecto a un control de la Dirección General de Bosques y Fauna de Santiago del Estero, que se nos efectuó entrando al río, lo que en principio nos generó una satisfacción por ver un operativo en lo que pensabamos era tierra de nadie… que terminó no siendo lo que parecía, ya que nos vendieron los permisos, y nos indicaron cuantas piezas podíamos sacrificar dependiendo la especie, más alla de que les explicamos que todos realizabamos Pesca y Devolución, insistieron, incluso indicándonos que si matabamos un dorado, este debía tener más de 60 centimetros…hasta ahí bien, pero la gran decepción llego cuando al terminar con nuestro control, vimos como impunemente se retiraban, frente a más de 30 pescadores furtivos quienes seguían sacando con distintas modalidades la cantidad de pescados que quisieran, inclusive mientran pagábamos el permiso podían verse capturas, una manera de actuar que indigna al pescador que realmente valora el recurso, lo cuida, y que lamentablemente se siente estafado por la desigualdad en el accionar de dichos controles.

El primer dorado del día

Pero volvamos a lo que realmente nos interesa, como les decía tuvimos la posibilidad de flotar, y la diferencia más sustancial es lograr llegar a lugares difíciles de vadear, teniendo la posibilidad de presentaciones que se hacen imposibles para algunos de nosotros, o simplemente de tocar palos ¨vírgenes¨. Tuvimos la suerte de mover unos pescados buenos el primer día, a mí me corto una vaquita que tomo en un tiro arriesgado, y después de un salto dejo mi línea arriba de un palo, perdiendo así el control y mi trofeo… luego me pasó algo raro, después de pelear uno de los buenos me cortó, pero esta vez se me partió el anzuelo que era un Mustad  Nº2, andan muy bien, y creo ser el único a quien le sucedió esto desde que visitamos Santiago, por lo que lo atribuyo a una falla del anzuelo, o una marca anterior, y no a una bestia.

un dorado muy bueno que me corto en esos palos

Juan Cruz tuvo la suerte de clavar uno muy bueno, que después de moverlo en una barranca tomó la mosca al medio de la corredera para salir volando atrás de un palo, y que por suerte el Negro pudo sacar de esa trampa para nuestro leader, así logrando una de las mejores capturas del viaje.

César y Juan Cruz con un excelente ejemplar, muy peleador

 

Luego nos bajamos en una empalizada muy buena donde almorzamos, y estuvimos tirando a unos palos soñados y casi sin gente, solo 2 personas en 150 metros, osea un lujo para un fin de semana largo y concurrido.

Yo con un dorado promedio, muy lindo

 

Fué ahí donde hicimos la pesca, de tres lanzamientos metí 2 amarillos muy lindos en ese lugar y moví otro, y luego perdí otro en los palos, todo en cuestión de minutos, pero el Negro movió el más grande del viaje pesando este según el boga Grip 5 Kg. Inclusive Eze, el fotografo tuvo la oportunidad de pelear un doraro que le dimos con la caña clavada, que después de una pelea terminó por zafar.

Juan Cruz con su vaquita

 

Las siguientes flotadas de los demás se desarrollaron de manera similar, aunque sin lograr capturas tan grandes como las dos del Negro, pero con actividad de a momentos muy intensa, en la siesta y durante la última hora.

Los dorados vuelan y cabecean para lograr escupir nuestra mosca

 

Moscas después de pasar por la mandíbula de un dorado

 

Juanca perdió un pescado muy lindo, y logró mover varios, con una serie de hechos desafortunados que incluyeron la ruptura de una caña Nº 8 tratando de recuperar una mosca, una vaca que se tragó el cable completo cortando en el leader, entre otras cosas… Ale, Seba y Juanma movieron varios amarillos y concluyeron que no era la misma actividad que vivimos el año pasado, aunque ahora con menos doradillos y capturas más interesantes.

Ale con un dorado muy lindo y sano

 

Durante los 3 días el agua se mantuvo cálida con temperaturas de hasta 30 grados, por lo que se hacía pesado vadear el río mucho tiempo, con peligro de deshidratarnos, aunque suene exagerado, por lo que los vadeos los realizamos de a ratos, regresando al campamento (paramos en hotel pero nos instalábamos durante el día bajo una buena sombra), a tomar algo fresco y a comer unos buenos asados.

Juanma con un muy lindo dorado que tomó una ¨bosterita¨

 

En lo personal, opté por pescar luego de las 5 de la tarde, horario en que el río se descomprime muchísimo de gente, y en donde la actividad comienza, y nos permite ver un salto tras otro a nuestro alrededor, me dío resultado pescar pocos palos y dejarlos descansar, logrando así hasta 3 capturas en la misma posición, 2 de ellas con el mismo dorado, según unas marcas particulares.

Saltos y más saltos

 

Una de las mayores emociones llegó el último día de vadeo en la misma zona, cuando Juanca presentando la mosca lejos debajo de un buen palo que prometía, metió una vaca gorda que dió una peléa muy buena exigiendo al límite el equipo Nº 6, terminó marcando el boga 4 Kg. aunque con desconfianza, yo creo que era más, tal vez 5 Kg., la imagen habla por sí sola…

Juanca y la vaca de vadeo

 

Cabe destacar que la mayoría de nosotros pescamos con equipos Nº 6, la mitad con líneas Saltwater, y las demás para agua fría. Ale y Juanca también probaron equipos Nº 8 teniendo buenos resultados también, ayudando a lograr unos metritos más que hacen en muchos casos la diferencia, y nos permiten sacar los dorados de los palos con mayor facilidad.

Seba con uno de los dorados en la flotada

 

Las moscas fueron todas modelos de Némesis, como la posteada en una noticia pasada en anzuelo Mustad 34043 Nº 2, 3 y 4, con combinaciones varias, destacó aparte de las clásicas, la combinación de cabeza color fucsia, y cuerpo verde, y otra que ató y bautizó Juanma como la ¨bosterita¨ ó ¨xeneize¨, con la cabeza azul, y el cuerpo amarillo. Recomendamos lastrarlas bien, aunque perdemos distancia en algunos casos, hacen la diferencia al hundir rápido. Cable de acero entre 20 y 40 libras, en lo personal prefiero que sobre, pondría 40 directamente.

Una peléa de Juan Cruz y un dorado muy lindo

 

Sin duda este río es un desafío que nos permite soñar con un trofeo, esperamos que quienes estén a cargo del cuidado de este recurso sepan del potencial  del lugar, para poder darnos estas lindas satisfacciones por muchos años más.

Nota: Octavio Costabile | Fotos: Ezequiel Peña

 

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